D e d i t o.

Ignoro qué es lo que lleva a un hombre a apuntar de este modo con el dedo como vínculo inherente a la verdad, a opinar tan rotundamente sobre lo humano y lo divino.

Debería esperar a hacerse viejo para evaluar dónde y cuanto colabora. No sé yo si a los inteligentes (él lo es) les merece la pena arrugarse el traje en según qué sillas.

No sigo o tenderé a lo mismo, y gratis, me basta con editar este plis-plas de vídeo en el que acusa de cosas espantosas al actual presidente de gobierno, cual si fuera un malvado de Disney.

“Zapatero es el revolvedor del resentimiento, ¿eh?, el que coge el resentimiento de la gente, ¿eh?, y lo transforma en fuerza motriz…”  (Juan Manuel de Prada en un programa que ponen en una cadena que tengo sintonizada entre un par de teletiendas).